¿Te mudas? Toma nota

Mudarse es un paso importante, nos llena de ilusión llegar al nuevo nido donde albergamos comienzos y aventuras, pero por otro lado, puede resultar agridulce si el cambio no nos convence. Cualquiera que sea el caso, si la decisión está tomada vamos a sacarle el mejor provecho para que afrontes con buen pie tu nueva decoración.

Como todo proceso debe iniciar bien, ordenado y pensado, no empieces a tirar cosas en una caja para luego no saber qué harás con ellas. Deja todo lo que esté roto, que ya no te guste o que no sepas qué haces con eso guardado. Es mejor llevarse las piezas correctas y luego irás completando lo que realmente te falta o te guste sin tener el estrés y el desorden como inquilinos en tu nueva casa.

Ve a la nueva casa y revisa cada espacio, si es necesario hacer algún arreglo de obra, este es el momento, antes de llevar cajas y muebles. Luego haz una limpieza profunda y a medir. Toma nota de las medidas en todas las áreas para que vayas a la segura a la hora de llevar muebles; no olvides alturas, ancho y ubicación de los tomacorrientes, interruptores y bombillos. Ya con estos datos a la mano te será más sencillo tomar decisiones reales.

Prepara un listado con los muebles que quieres conservar y una vez compruebes que caben en el nuevo hogar, anota las reparaciones, ajustes o pintura para que lleguen ya listos, esto incluye cambios en tapicería o tiradores. En la medida de lo posible no lleves mobiliario “provisional”, es posible que termine quedándose en la nueva casa y nunca se sustituya por lo que realmente quieres.

Repasa lo que no te gustaba de tu antigua decoración, eso de que todo lucía muy pegado o lleno de “corotos”, sin vida o con colores que no te hacían sentir bien. Es el momento de cambiar y mezclar, esa butaca que estaba en la sala tal ahora te va súper en el nuevo balcón o por fin podrás colocar esa alfombra que sueñas.

Es momento de involucrar a todos en casa con el proceso, pareja, hijos, mascotas, claro está, a, menos que sea solo para ti. En el espacio que van a habitar es necesario que se cumplan las necesidad y gustos de los habitantes, esto no necesita un montón de metros cuadrados, solo un poco de creatividad e ingenio. Lo verdaderamente importante es que el cambio sea de provecho para todos, para que empiecen a disfrutar el estar en casa.

No pierdas la paciencia, es un proceso que no se da de la noche a la mañana, no abultes el presupuesto ni el nivel de nervios por hacerlo todo de una vez, toma el tiempo para conocer tus espacios, ventilación, iluminación y las nuevas dinamias o rutinas que allí se darán y ya verás como con el tiempo van construyendo detalle a detalle nuevas historias y momentos especiales.